Ha sido como una especie de amor a primera vista... Es la Suite Maison Martin Margiela del hotel Les Sources de Caudalie.
Los blancos impolutos contrastando con el clasicismo de una bañera con patas doradas y con la explosión de modernidad roja que proporciona el beso más grande del mundo. Lo vanguardista contrasta con un enclave clásico... Moderno y clásico: una pareja bien avenida. Creo que no puede haber una demostración más evidente de éxito sobre la fusión de un continente tradicional y antiguo, con contenidos de última generación. Una imagen vale más que mil palabras... recrearos en ella y disfrutar del fin de semana que queda por delante!